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Fecundación in vitro

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He leído y acepto el aviso legal.

Una forma sencilla de superar gran parte de los problemas más comunes.

La fecundación in vitro consiste en extraer un óvulo de la mujer y fecundarlo en el laboratorio antes de volver a implantarlo en el útero. Es un método sencillo y que tiene éxito en una gran parte de los casos.

¿Para quién está indicado?

  • Para mujeres que han participado en cuatro o cinco intentos de inseminación artificial sin éxito.
  • En casos de mujeres que sufran endometriosis, o tengan sus trompas de Falopio dañadas.
  • En caso de hombres con insuficiente cantidad o calidad de espermatozoides.
Fecundación in Vitro

Esta técnica se compone de seis fases

  1. Estimulamos el ovario mediante el uso de hormonas para conseguir así que produzca mayor número de óvulos.
  2. Extraemos los óvulos por vía vaginal, utilizando una técnica llamada punción folicular. Se trata de una intervención de unos 15 minutos, que se realiza con la paciente sedada. Tras un control rutinario, ésta es dada de alta y abandona la clínica unas 3 horas después de haber ingresado.
  3. Inseminamos los óvulos poniéndolos en contacto con los espermatozoides del futuro padre e incubándolos a la misma temperatura corporal de la mujer.
  4. Después de 18 horas, se examinan los óvulos y se cultivan durante dos o tres días aquellos que han resultado fecundados.
  5. Se implantan uno o dos embriones en el útero de la futura madre. El proceso de implantación se realiza en el quirófano, pero es rápido e indoloro y no necesita anestesia.
  6. Habitualmente, se congela el resto de los embriones mediante vitrificación.