¿Qué puedo esperar de los partos con el equipo de Clínica Zuatzu?
Infórmate sin compromiso
Es vuestro momento, son vuestras decisiones
En Clínica Zuatzu pensamos que es esencial mantener la mayor humanidad posible en el momento del parto, por eso incorporamos de manera rutinaria muchas prácticas que no se llevan a cabo en todos los centros y que, a menudo, solicitan las madres y sus parejas.
Creemos que respetar tu voluntad es la base de la mejor asistencia que te podemos brindar, siempre con el límite de tu seguridad y la del niño.
Los partos con el equipo de Clínica Zuatzu se realizan en las modernas y confortables instalaciones de Policlínica Gipuzkoa. Cuando llegues, siempre habrá alguno de nuestros ginecólogos para atenderte. Y aunque no sea el mismo que ha llevado tu embarazo, estará al día sobre el mismo.
Los médicos de Clínica Zuatzu se reúnen semanalmente para informarse y debatir, conjuntamente, sobre los embarazos que se están llevando en ese momento. Y es que en Zuatzu cuentas con tu ginecólogo, y el conocimiento, asesoramiento y dedicación de todo un equipo.
En la fase de dilatación
El proceso de dilatación se realiza en tu habitación hasta el momento del expulsivo. Allí tendrás una pelota de parto, que a muchas mujeres les resulta más confortable. En cualquier caso, no tendrás por qué quedarte tumbada en la cama y tendrás completa libertad de movimiento.
También puedes escoger quién quieres que te acompañe, aunque suele ser muy importante contar con el apoyo de tu pareja en esos momentos.
Por supuesto, podrás llevar contigo cualquier objeto que te ayude a pasar el tiempo (libros, música, dispositivos electrónicos…)
En cualquier caso, pensamos que la intimidad de la habitación es el mejor lugar donde esperar la llegada del bebé ¿no crees?
Hasta que no se te administre la anestesia epidural la monitorización será intermitente, y eso te permitirá mejor movilidad y adoptar las posturas en las que te encuentres mejor.
Tienes completa libertad para elegir si deseas colocarte o no anestesia peridural o epidural. También puedes escoger el momento, aunque si tu idea es ponértela, te aconsejamos que no esperes hasta el último momento, ya que el efecto tarda unos 30 minutos en aparecer.
Si no quieres anestesia, cuentas con una ducha para relajarte tranquilamente. Por el momento no tenemos bañera en ninguna habitación.
Durante el parto
Bajarás al paritorio en tu propia cama.
Cuentas con una cama de partos que tiene la posibilidad de colocarse en múltiples posiciones (acostada, semisentada, sentada del todo, con las piernas en perneras o con los pies apoyados).
Si es posible y vuestro ginecólogo te lo sugiere existe la posibilidad del parto vertical, con una barra donde ayudarte a empujar, haciendo el parto y el expulsivo más cómodo y fisiológico. Es una opción que suele resultar muy satisfactoria,
Tenemos un banco para el parto, pero sólo podemos utilizarlo en situaciones especialmente seleccionadas. Podéis consultarlo en el momento del parto con vuestro ginecólogo y vuestra matrona para ver si cumplís con las condiciones para poder usarlo.
En todo momento, incluso allí, estarás monitorizada por seguridad para el bebé. La monitorización puede ser intermitente.
El pujo lo llevarás tú misma, con la colaboración de tu pareja (que siempre puede estar presente en el parto si tú quieres) y nuestro asesoramiento para hacerlo más efectivo.
Entre los pujos, puedes solicitarle a la matrona un espejo si quieres seguir con tus propios ojos el descenso de la cabeza.
La episiotomía no se realiza nunca por rutina. Es difícil saber de antemano cuándo una paciente la va a requerir hasta que llega el período expulsivo, pero en todo caso puedes estar segura de hacerla es la excepción y no la norma en nuestro equipo.
Si fuera necesario dar puntos, los daríamos con hilo reabsorbible, por lo no hay que quitarlos.
Vuestro bebé siempre estará contigo o con tu pareja al salir. El contacto piel con piel es fundamental, por lo que te lo pondremos encima nada más salir, siempre que las condiciones así lo permitan y con la aprobación del pediatra, que está presente en todo momento.
Siempre que sea posible, realizamos el corte del cordón umbilical pasados los dos minutos de vida. Así permitimos la libre circulación de sangre para evitar el riesgo de anemia del recién nacido. Esto lo decidirá vuestro ginecólogo en el momento.
Después del parto, si es posible, realizaremos alumbramiento activo para disminuir el riesgo de sangrado.
La recuperación se hará en tu habitación y subirás con tu bebé allí en cuanto terminemos de revisarte. Tu pareja siempre estará contigo acompañándote si lo deseas.
En el caso de las cesáreas programadas, tu pareja puede estar contigo en el quirófano si el anestesista lo permite. Habitualmente, al nacer el bebé, puesto que no podemos hacer piel con piel por motivos obvios, se queda con tu pareja.
Si deseas más detalles o tienes dudas sobre algo, puedes consultarlo con tu ginecólogo en la consulta. ¡No dudes en preguntar!
En Clínica Zuatzu estamos para ayudarte.